Recuerdo que cuando era pequeño, también me encantaba dibujar y me pasaba horas y horas inventando historias muy graciosas. Como soy hijo único, y no tenía con quien compartirlo, muy pronto todo aquello se quedó atrás. Me encanta ver que mi niño (que también es hijo único de momento) ahora tiene con quien compartir sus fantasías, y ver lo feliz que le hace sentir que lo que hace es importante.